Nuestro aquelarre

4 de agosto de 2010

La Cita Doble


By: Irene


Edward llevaba unos días muy raro, bueno a decir verdad muchas cosas empezaban a ser algo raras en mi vida, primero él, con sus ataques injustificados de celos, que me volvían loca por completo, ¿acaso no sabía que él era el único hombre en mi vida?



Bueno, y no digamos la cara con la que se me presentaba de vez en cuando, como si una pena muy grande invadiera su pecho, era algo sobrecogedor, pero cada vez que del preguntaba al respecto solo se encogía de hombros y lo achacaba al cansancio de las clases o cosas similares, frustrante a decir verdad.


Las otras cosas raras eran las conversaciones y actos del resto del alumnado del instituto, era extraño, siempre me habían mirado raro, una vez en los servicios de las chicas, mientras yo estaba ocupando uno de ellos, oí una conversación relacionada conmigo, diciendo que la chica nueva, yo, la “rara”, les había quitado la oportunidad hacia con Edward y Jasper, pero eso solo me hizo sonreír. Lo de Edward sí que era verdad, y más valía que no se les ocurriera meterse con él, no me conocían estas pécoras, pero lo de Jasper no supe el porqué, el era libre, si es cierto que no tenía mucho contacto con las féminas, pero creo que no era por mi culpa en absoluto ¿no?


Pero ahora era diferente, las miradas extrañas, el cuchichear entre los pasillos y su silencio a mi paso era más desconcertante que otras veces.


Antes de salir de las clases, pille a una chica pronunciando mi nombre y el de mi novio, y no pude contenerme, era una de esas que se las daba de ser la más popular, “imbécil”, así que sin poder remediarlo me acerque a ella con deliberada rapidez y la cogí de la camisa, empujándola contra la pared.


— ¿Podrías decirme que tienes tú que hablar de mí y de mi “novio”?— le dije con los ojos encendidos pero la voz calmada, de esas que dan miedo de solo oírla


La chica empezó a tartamudear y las supuestas amigas que la rodeaban salieron corriendo literalmente. Después de un montón de nada, no sé, yo no, la dejé por imposible y la solté, no sin antes empotrarla con un poco más de fuerza de la necesaria contra la pared. Estas pijas de mierda me exasperaban.


Estaba intranquila, yo no era de las que hacían caso a habladurías ni mucho menos, pero las cosas empezaban a mosquearme un poco.


Hable con Jasper sobre ello y me dijo que él no había notado nada fuera de lo normal. ¿Desde cuándo los hombres notaban ese tipo de cosas?


— ¿Qué te pasa, estas muy pensativa Irene?— me decía mi amigo.


—Nada, es que no se que ponerme para la salida de esta tarde.


Y no es que no supiera que ponerme, es que no tenía nada aparente para el momento, todo mi vestuario era de ropa de sport y las cosas un poco elegantes brillaban por su ausencia dentro de mi ropero.


—Tu estarás guapa con cualquier cosa que quieras ponerte.


El era tan tierno, que no pude más que darle un abrazo cariñoso y me ruborice en el acto.


—Sí, supongo que unos vaqueros y una camiseta con agujeros del trabajo será una buena opción ¿no?


Los dos nos reímos, pero yo por dentro sí que estaba algo apenada, no tenía ni dinero ni tiempo para poderme comprar algo decente para la ocasión.


—Tu piensa en lo bien que nos lo pasaremos viendo a nuestros queridos Beatles, será una buena noche y mañana no hay instituto, así que perfecto.


Me costaba mucho hacerle la pregunta clave, pero mi curiosidad no dejaba de martillearme la cabeza.


— ¿Has encontrado ya una acompañante para esta noche Jazz?— le dije queriendo inconscientemente, que negara.


— Si, supongo que sí.


Pero al ver que mi sonrisa se ensanchaba, queriendo parecerle feliz por su respuesta, el mostró un cierto dolor en sus facciones y sin casi despedirse de mí, se fue por el pasillo, tan rápido que me quede helada.


¿Qué demonios le pasaba ahora?


Las clases terminaron y mi novio me llevo a casa. Quedamos dentro de dos horas, tiempo suficiente para ponerme mis andrajosos pantalones vaqueros.


Cuando quedaban no más de veinte minutos para la cita, el timbre sonó, y me sorprendió que Edward llegara tan pronto, el siempre era puntual, pero no tanto.


Al abrir la puerta el que se encontraba detrás era Jasper con una caja enorme entre sus manos.


Me la ofreció y me dijo que no era un regalo, que solo era un préstamo, así que con mucha curiosidad y dejando ver mi enfado por traerme cosas, la abrí.


Era un vestido, de gasa, de color champán, con unos ribetes dorados en el bajo y un generoso escote, de los que él sabía que me gustaban.


— Ni pienses que voy a aceptar esto, Jasper— le dije con tono de reproche y devolviéndole la caja.


—Por favor, deja por una vez que pueda darte algo, tu nos das mucho a nosotros, solo por esta vez deja que compense las cosas ¿ok?


— ¿Pero qué leches os he dado yo a vosotros? Aparte de problemas claro.


— Tú sabes que éramos unos idiotas hasta que tú viniste y cambiaste nuestro mundo.


— Si claro, la salvadora de los desamparados y desvalidos hombres sexys y ricos, ¡ja!


Pero el solo se río, aunque eso solo hizo que mi enfado fuera mayor, de verdad no iba a permitirle que me diera algo tan caro, como eso, se podía ver claramente en la caja el nombre del diseñador y era de los que sus trajes costaban más que mi sueldo de un maldito año.


Solo me soltó la caja en mis brazos de reproche que tenia alzados contra él, y dándose la vuelta con rapidez soltó un “te veré dentro de un rato, y espero por tu bien que sea con eso puesto, jovencita”, para salir riéndose por el pasillo de mis apartamentos.


Quedaban tan solo unos dos minutos para que Edward llamara a mi puerta y todavía tenía mis vaqueros y suéter puestos, pero la curiosidad de cómo me quedaría aquel espectacular vestido me estaba matando, así que lo saque con mucho cuidado de su caja y al levantarlo pude comprobar que era mucho más bonito de lo que en un principio me pareció.


Su color, su forma, y el tacto de la tela en mis dedos era sublime, como si no pesara, tenía unas varillas en los costados, como si fuese de estilo corsé, y decidí que no pasaría nada por vérmelo puesto.


Al sentir su tacto en mi piel, me quede sorprendida de lo cómodo que era, parecía que no llevaras nada encima, me resaltaba mis pechos, mostrando un canalillo muy sensual, y mis hombros al descubierto, ya que se abrochaba al cuello con dos finas tiras. Me llegaba por encima de las rodillas y mi diminuta cintura quedaba muy bien sujeta por la tela. Al mirarme en el espejo me arrepentí de inmediato, me veía tan bien que ya no pude quitármelo.


El timbre sonó, y fui con mucha vergüenza a abrir la puerta.


La cara de Edward al ver mi vestido me hizo enrojecer, casi podía ver el inicio de una baba cayendo por sus comisuras, y eso me hizo sonreír.


— ¡Madre mía!, estas espectacular, preciosa, mmm… mmm— dijo soltando un gruñido de aprobación y deseo.


Solo pude darle las gracias y sonrojarme algo más. Se aproximo a mí casi en cámara lenta, como si esa cercanía me fuese a romper, y me envolvió en un abrazo que me hizo estremecer, me sentía tan bien entre sus brazos que casi olvide que nos estaban esperando.


Después de unos cuantos besos algo mas efusivos de lo normal, que casi tiran por tierra el plan de la noche, me separe dolorosamente de él, y agarrando con una mano mi bolso y con la otra la mano de Edward, salimos de mi apartamento, para ir a nuestra cita.


—Edward, ¿tú sabes quién acompañara a Jasper esta noche?


Mi pegunta no me pareció nada del otro mundo, pero al parecer a Edward no le hizo ninguna gracia, porque su semblante tranquilo y hermoso torno en una mueca de enojo e ira. Pero me contesto que no sabía con quien iría, así que hay deje la conversación, de todos modos no tardaría en descubrirlo por mí misma.


Llegamos pronto a la colina del Stadow, y era evidente lo concurrido del acto, porque nos costó más de un cuarto de hora aparcar el coche. Al entrar al recinto al aire libre, nos dirigimos a las localidades que Edward había reservado hacia tiempo, y que gracias a unos contactos, pudo ampliar para Jasper y su acompañante. Me sentía algo nerviosa y no sabía si era por el espectáculo que llevaba tanto esperando o si era por conocer a la cita misteriosa de Jasper.


Y cuando llegamos donde ellos se encontraban una chica con el pelo oscuro y muy mañosamente recogido, estaba a su lado, de espaldas a nosotros, mi curiosidad aumento notoriamente. Cuál fue mi sorpresa que al decir buenas tardes, ella se volvió y ante mi estaba Sofía, la chica de la cafetería, y eso me hizo gracia, porque prefería a esta chica tan simpática y con pinta de buena persona, que a cualquiera de las otras remilgadas del instituto.


Me dirigí a ella, para darle dos besos de bienvenida, pero aunque ella me los correspondió, pude ver que estaba algo nerviosa y tensa. Nos pusimos en nuestros respectivos asientos para ver de empezar el espectáculo. Sofía estaba sentada a mi lado, y los chicos estaban cada uno en una punta. De vez en cuando intentaba hablar con ella, pero al parecer la vergüenza o el no saber mucho del grupo la dejaban algo cortada. Jasper de vez en cuando me hacía comentarios sobre lo que estábamos viendo, y es que tanto él como yo éramos fervientes admiradores de los Beatles.


Cuando empezaron a poner las escenas inéditas, no me pude contener, y de un salto me puse de pie, acercándome a Jasper para que compartiera conmigo mi entusiasmo, los dos como críos dábamos saltos de alegría, intentando tararear las notas que escuchábamos. Nos cogimos de las manos y estábamos completamente ensimismados en la pantalla. Edward parecía muy aburrido y con la mirada perdida en el vacío, era evidente que no se lo estaba pasando nada bien allí. De reojo vi como él y Sofía empezaban a hablar, pero no les hice mucho caso, puesto que me lo estaba pasando divinamente con lo que veía.


—Discúlpame Irene ¿sabes dónde está el baño?—me decía Sofía, sacándome de mi estado de euforia.


— Si claro, pero ¿no puedes esperar un momento, ya casi termina?— le dije a sabiendas que unas explicaciones teóricas, no la harían nada más que perderla.


Ella bajo su cara, con la clara evidencia de su urgencia, que digo que no parecía de esas que bailan por ir al baño de las ganas que traen pero parecía sofocada, tal vez se sentía mal, o estaba en su periodo, yo que sé. Soltando un suspiro inconsciente, decidí llevarla al baño al final.


— No, tú disfruta de la peli, yo la acompañare—dijo Edward al verme pararme de mi asiento.


Y es que mi novio era el mejor del mundo, así que después de decirle que si no le importaba, se fueron dejándonos a Jasper y a mí, en la excitación del momento de Beatles.


Pasaron más o menos unos cinco minutos, y ya todo acabo, había sido el final mas apoteósico del mundo y yo estaba todavía muy agitada y activada, y cuando por fin sonó la última nota, Jasper me cogió en un arrebato de avidez y empezó a darme vueltas como si de un tiovivo se tratara. Estábamos como locos, había sido todo lo que me había esperado y compartirlo con él había sido lo mejor.


Con tan mala suerte que uno de mis pies al dar aquellas vueltas, rozo a una chica que estaba a nuestro lado, y con el golpe se le volcó la bebida en su vestido, dejándola toda empapada y pringosa.


Rápidamente me disculpe, pero al parecer a ella no le serbia solo con una disculpa y empezó a intimidarme, (esta chica no sabía con quien se estaba metiendo), deje toda mi alegría de lado y en uno de sus empujones la propine un bofetón en toda la cara.


Su novio, uno alto y bastante musculoso, intento llegar hasta mí para agredirme, pero Jasper se lo impidió, dándole un fuerte golpe. Las peleas no eran de mi agrado, pero al parecer estos tipos eran ya unos expertos en dichos temas. Las cosas fueron a mayores y en un intento de arañarme la cara, la chica me arranco literalmente de cuajo la tira de mi vestido, haciendo que estallara en las más violentas llamas, y la cogí del pelo para darle una patada con mi rodilla en toda la cara, haciendo con ello que empezara a chorrear sangre de la nariz.


Vinieron los guardias del recinto a separar la pelea y a ellos se los llevaron sujetos y a nosotros igual pero para otro lado. Nos introdujeron en una sala pequeña, que tenía un par de sillones y una mesa con papeles y material de oficina. Y después de un rato, nos dijeron que en unos momentos vendrían para tomarnos los datos.


Yo pensaba en Edward y Sofía, ellos de seguro se estarían preguntando donde nos habríamos metido y no había nadie fuera que les pudiera decir, así que empecé a ponerme nerviosa, no quería que se preocuparan por nosotros la verdad.


Jasper noto mi estado de ánimo y antes de que las lagrimas de rabia cayeran por mi rostro el ya estaba abrazándome para calmarme un poco.


Mi vestido no se sujetaba solo, tenía que poner una mano en mi pecho para poder ocultar mi ropa interior, y eso me hacía sentir algo incomoda.


—Es una lástima que con lo preciosa que estas, te hayan roto el vestido, aunque pensándolo mejor así estas de un sexy— decía Jasper intentando que me relajara y dejara de llorar


—No seas tonto, que rompí el vestido y ahora de seguro no se podrá devolver.


—No hay que devolverlo a ningún sitio tontita—respondió tocándome con un dedo mi barbilla.


—Pero tu dijiste que era un préstamo, así que yo pensé que…


—Solo lo dije para que no pusieras tantas pegas a ponértele, te mentí.


—Muy gracioso Jasper, pues no puedo aceptar algo tan caro, así que voy a ahorrar y te devolveré hasta el último centavo que te haya costado, porque…


Pero no me dejo terminar, solo pego su cuerpo más al mío y estampo sus labios contra mi boca, mojándose la cara con mis lágrimas y haciendo que me quedara helada por la sorpresa de sus actos. Pero no me separe, me empecé a sentir cómoda, no era para nada violento, era como si yo misma hubiese estado esperando esto durante mucho tiempo, y después de un segundo cerré mis ojos y le correspondí al beso, sin pensar en nada, sin hacerme preguntas, solo dejándome llevar en el beso y contacto más tierno y necesario que había sentido nunca.


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¡Mis chicas! (y Sandocan) los extrañaba a mas no poder. Acepto, que, aun no he leido sus capis, estoy muy atrasadita pero yo intento y pues, no se molesten ¿ok? que si lo hacen mi Beu dijo que se las pagan, ja, ja.


Bueno, este capi es de mi hermanita, una chica que ustedes saben, yo amo y que me alegra el dia cuando se algo de ella, ya sea por blog o e-mail. Como saben algunos ella se va de la Cuidad un par de semanas, asi que, lo mas probable es que este sea el último capi de Primeras hasta septiembre. Yo estoy bien por si se lo preguntaban y el domingo, mi primita linda, mi Ellie, va a publicar lazos por mí. Cerraremos, despues, en una semana el blog para hacerle mejoras y cambios ¿les parece?


De todos modos, pondremos una nota para que no se les pase, gracias por sus deseos, palabras de aliento y oraciones, me llenan el alma.


Un beso.

6 comentarios:

sandocan en bicicleta dijo...

me arrancaste una sonrisa de risa y de alegria cuando vi que pusiste mis chicas (y sando).. jaja por fin aprendiste la lecicon amiga! ahora si que me tenes en cuenta.
ojala todo resulte de la mejor manera asi te tenemos aqui con la alegria de siempre. estoy ansioso por los cambios del blog.
te queremos mucho, tus lectoras, y sandocan.

un saludo desde la lejania.

Irene Comendador dijo...

Hay mi niña que alegria ver que estas mejor, y si al final te decidiste a publicar supongo que sera por ello, un beso mi reina, te estoy echando tanto de menos, te estraño mucho, mi hermana del alma, nunca te alejes de mi, que esta ausencia me duele mucho, me duele fisicamente.
te quiero con todo mi alma, Irene

ܤ Dulcinea dijo...

Hola Isabella, ahh me encanto el capitulo, la historia de ambas me atrae un monton, convinarlas a ti y a Irene hace una historia extremadamente hermosa =) ahhh ya se besaron Irene y Jasper ahhh que pasara despuesss..
Por suerte la pelea termino para bien, pero los nervios me superan y me hacen imaginar bastantes hechos del siguiente capi jaja espero suban pronto, es una historia muy bella, nunca lo duden n_n

Cuidate.
Besos

Atte: Anto

ܤ Dulcinea dijo...

Hola Isabella, ahh me encanto el capitulo, la historia de ambas me atrae un monton, convinarlas a ti y a Irene hace una historia extremadamente hermosa =) ahhh ya se besaron Irene y Jasper ahhh que pasara despuesss..
Por suerte la pelea termino para bien, pero los nervios me superan y me hacen imaginar bastantes hechos del siguiente capi jaja espero suban pronto, es una historia muy bella, nunca lo duden n_n

Cuidate.
Besos

Atte: Anto

..*D!¡ana: dijo...

aaa!!! dios!! estuvo genial el capi se lucieron ;) y el beso de irene y jasper ¡wow! jeje espero con ansias el oto capi jaja...
Me alegra mucho escuchar, por ti misma, sexy q te encuentras mejorsillo; lastima q vayas a cerrar el blog temporalmente, me haran falta los relatillos, pero bueno sobrevivire =D..
Cuidate mucho y besillos..

Att:..*D!¡ana.

Ariusk dijo...

aHHHHHHH MÍ Cole como me alega que estes mejor de verdad que siiii!!!!!

Ahh el capi excelente como siempre, tu e Irene hacen una pareja explisiva ajejeje!!! Por finnnnnnnnnnnnnnn Jasper se decidio a actuar ahhhh!!!

Jum Sofi y Ed procupados??? ya te aviso chiruli jeje quien sabe que se habran hecho esos dos!!!

Y que cosa hasta Septiembre????? ahhh bueno lo esperare con ansias de verdad!!!!

Mis eternas bendiciones para ti mi Is y besos y saludos para Irene tambien!!!

Cuidateme mucho nena!!! Saludos!